Lamentos

Hay de quien viste su orgullo con humildes hábitos. Hay de quien conoce a la perfección la definición de la palabra compasión, pero que vive ajeno a su significado. Hay de quien cuando da una limosna con su mano derecha pone la izquierda esperando una recompensa. Hay de quien renuncia a su nombre mundano para mundanear su nombre espiritual. Hay de quien sirve a los demás con la intención servido. Hay de quien cuando abre su mente permite que se escape su motivación. Hay de quien cuando abre su corazón permite que entre el odio. Hay de quien mira buscando faltas. Hay de quien frunce el ceño para aprender a reír. Hay de quien condena una sonrisa. Hay de quien renuncia a la felicidad para buscar felicidad. Hay de quien proclama las faltas de su hermano para ocultar las propias. Hay de quien confunde amor con apego. Hay, hay, hay…. Hay por quien se de por aludido….